Libaneses en México desde 1878.
Los primeros emigrados
Hicieron camino al andar
El primer emigrante libanés en el siglo XIX, fue Antonius Bashaalany, de la aldea de Salima, quien viajó a los Estados Unidos en 1854, para trabajar con una dama residente en la Quinta Avenida de Nueva York. Su vida sólo alcanzó dos años más, pues falleció en 1856. El inmigrado Nicolás Abousambra, (1890), que radicó en Torreón, Coahuila hasta su muerte en 1943, decía que Bashaalany llegó en 1874.
El nombre del probable primer emigrado libanés que llegó a México ha sido transmitido bajo la tradición oral. Sobre los inicios de la inmigración libanesa en México se carece de suficientes registros y nadie puede afirmar con certeza quién fue el primer inmigrado. Libanés pero, la hipótesis más sólida, es la referente al sacerdote Boutros Raffoul, quien en 1878, llegó a Veracruz. Cuentan que la gente le mostraba respeto al saber que venía de las santas tierras del Medio Oriente y por la ayuda que daba a los pobres.
En 1887 su familia perdió la comunicación postal con él hasta su ingresó a Guatemala. En 1888, para nuscarlo, llegó su hermano Philippe Raffoul, quien nunca lo localizó; decidió establecerse en Monterrey hasta su muerte en 1916.
Otro libanés considerado precursor fue Santiago Saouma Aoued, de Hasroun; llegó en 1879 y, según afirmaba el profesor Nehme Francis, migrante intelectual de ciudad de Saida y quien residió en Mérida, él había sido el primero en llegar a México por el puerto de Progreso. Murió en 1931.
El primer libanés ortodoxo llegado a México fue el R.P. Yousef Shalhub, llamado aquí José Ayub, quien tuvo lazos familiares con la familia Abizad, en el último cuarto del siglo XIX.
Por supuesto, nada de esto tendría un valor real, si no contamos con su apoyo y el de toda la comunidad mexicana de ascendencia libanesa para hacer crecer este testimonio histórico y cultural; es importante recalcar que éste es un proyecto permanente y siempre serán bienvenidos su material, a manera de donación o también de préstamo para sacarles copias y digitalizarlos.